Impulso: Sensación de actuar sin pensar
Desesperación: Sensación de no saber que podría pasar,
desesperanza.
Amor: Sentimiento que nace de una persona hacia otra.
Quisiera poder lanzarme sin pensar en que podría pasar, pero no es así como funciona. En realidad, funcionó así por suficiente tiempo como para seguir actuando porque me nació hacerlo así. No es un juego de damas y la única opción no es dar jacke mate, hay que planear la estrategia para llegar con la mayor cantidad de peones en pie. No queremos perder, pero para ganar hay que meditarlo un poco. No querer y querer es difícil de entender, ni yo lo entiendo ¿tú me entiendes?
No sé cuál podría ser el resultado de mi ecuación, no sé si
la hipótesis me funcione, no sé si pretender que es un curso del instituto será
suficiente. No podemos observar desenlaces en cuentos de hadas, no puedo
suponer que estás bien, ni que serás feliz. Simplemente podría ir a leerme las
cartas y tratar de encontrarle sentido a lo que sea que digan; si fuera tan
fácil…
Aquí nadie ganó la copa, no es el mundial, no es nada de
eso. Aquí nadie gana y nadie pierde, solo se vive y se continúa el sendero
marcado. No mirar a los lados es una recomendación, no pensar en lo que podría
pasar también podría funcionar, pero ¿Qué podría pasar? Que incierta es la
respuesta, que arriesgado el acto de saberla y que dulce saber que puedes tener
la respuesta con solo pulsar un botón. Pero la vida no funciona así, aquí no
hay archivos que formatear y todo estará bien, aquí el archivo está dañado, mal
guardado y tendrás que volverlo a escribir, pero se me olvidó de que trataba
así que tal vez cambiemos el tema a ver si queda mejor.
No podemos comenzar una historia que no se recuerda. A veces, es mejor volver a escribir porque te inspiras más, ya tienes experiencia y
sabes que guardarás el documento en una versión compatible con las demás. Si en
Microsof Word me hubieran dicho eso ante, tal vez mi archivo no se hubiera
dañado, tal vez hubieras guardado una copia en tu usb, pero hasta el usb lo
perdiste y no queda más que volver a escribir. Que ironías tiene la vida, ojalá
este archivo se guarde bien, ya tomé las precauciones necesarias.